Descripción
El queso Emmental rallado es un queso de origen suizo elaborado exclusivamente con leche de vaca.
El queso Emmental rallado pertenece a la familia de los quesos semiduros y tu pasta prensada destaca por una textura elástica. Esta, es de color amarillo mientras que en el interior podemos apreciar un queso de un amarillo más apagado, casi marfil. Es muy importante controlar bien la leche que se utiliza durante la elaboración del Emmental, ya que puede aparecer un exceso de acidez que estropee el producto final. La leche que se utiliza para conseguir queso Emmental debe ser leche cruda fresca y las vacas solo pueden estar alimentadas con hierba o heno, sin aditivos artificiales, todo natural.
Para elaborar el queso Emmental rallado barra se necesita mezclar esta leche con el cuajo y calentarla en grandes ollas de cobre, en las que se procederá a separar el suero de la leche. Una vez frío, se retira este lienzo y el queso se cubre con salmuera durante dos días, a una temperatura de entre 22 a 27 °C, que será la causante de los propiónicos que hemos comentado anteriormente, que favorecen la aparición de sus famosos agujeros. Por último, es muy importante el proceso de maduración del queso Emmental, que debe realizarse en bodegas especiales en las que tendremos que variar su temperatura desde los 6° C durante las primeras semanas hasta alcanzar los 15° C, terminando finalmente a 23° C durante mínimo 60 días que puede durar su maduración, encontrando variedades maduradas durante 4, 6, 8, o incluso 12 meses. El mejor momento para consumir el queso Emmental es durante los meses de mayo a octubre, aunque también se puede extender de abril a diciembre.
El queso Emmental, como bien nos indica su nombre, proviene del valle del río Emme, en el cantón suizo de Berna, un territorio de montaña muy utilizado para el pastoreo.